En la segunda mitad de la década de 1970, surge en Europa y posteriormente en los Estados Unidos, un nuevo sistema derivado del ya consagrado uso de las técnicas de aplicación en frío, con el empleo de emulsiones asfálticas. Ese nuevo método recibió el nombre de Micro-Revestimiento Asfáltico en Frío (MRAF).
Entonces, la técnica se difundió por diversos países, hasta que, en la década de 1990, llegó a Brasil con el desarrollo de una nueva generación de emulsiones asfálticas catiónicas poliméricas de ruptura controlada. En 1997, ocurre, con gran éxito, la primera experiencia con micro-revestimiento asfáltico en frío en Brasil en una carretera con un alto volumen de tránsito, la Carretera Presidente Dutra BR-116/SP. Desde entonces, la técnica empezó a ser utilizada a gran escala por el entero territorio nacional.
El Micro-Revestimiento Asfáltico en Frío es una mezcla asfáltica que consiste en la asociación de un agregado triturado de alta calidad (polvo de piedra y gravilla), relleno mineral (cal o cemento), emulsión asfáltica catiónica elastomérica de ruptura controlada, agua y aditivos químicos (si necesarios). Él presenta una consistencia fluida, de modo que puede ser esparcido sobre una superficie previamente preparada.
El Micro-Revestimiento Asfáltico en Frío es, principalmente, aplicado en la conservación y rejuvenecimiento de pavimentos que necesitan de impermeabilización y mejorías en las condiciones de seguridad y fricción. Sin embargo, existe un amplio campo de aplicación de la técnica como solución en la pavimentación:
Además de las aplicaciones arriba, Garcia Monteiro posee como marca la fabricación propia de las Plantas de Micro-Revestimiento que, aliadas al laboratorio de mezclas asfálticas, permite que siempre innovemos y desarrollemos nuevas soluciones, tales como el Micro-Revestimiento Asfáltico en Frío de alto desempeño (SAM), el GAP Graded en Frío, el Llenado de arcén en cuña y el Llenado de paso con material fresado.
Considerando las técnicas de pavimentación y mezclas asfálticas existentes, el MRAF presenta un excelente costo-beneficio por tener características constructivas que posibilitan intervenciones de menor porte y costo. La utilización del MRAF es esencial para sistemas de gestión de pavimentos (SGP) visto que retarda la evolución de los defectos del pavimento, así postergando las intervenciones de alto costo de restauración y reconstrucción del pavimento.
Además de los beneficios de la reducción de costo, el MRAF posee otras ventajas excelentes:
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